Nació en 1948, ha acompañado al colectivo de cazadores y pescadores,atendiendo a sus necesidades y evolucionando con ellos.
Pero, en los últimos años, el mundo ha cambiado a una velocidad casi imposible de asimilar. Las nuevas generaciones viven nuevos problemas y buscan nuevas oportunidades desde diferentes sensibilidades. El futuro de nuestra actividad pasa por abandonar viejos esquemas y abrazar nuevas maneras de entender lo que representa: la verdadera pasión por la naturaleza.
La caza y la pesca son la manera más ética y sostenible de obtener alimento. Y, por lo tanto, es un argumento de fuerza y valor al que debemos sumar otro: la caza y la pesca son actividades que sostienen y garantizan una relación intensa y equilibrada con el medio natural. Son actividades que mantienen los lazos con el mundo rural y evitan los problemas de la hiperpoblación urbana (pérdida de biodiversidad, degradación de paisajes…).
